jueves, octubre 27, 2005

la kali de todos los dias


Mi primer gran hijo, el que me dió pasión por el cartel, la Kali: por eso diariamente pienso que es importante creer en el diseño.

Y mañana también, así que para el que esté deprimido lea diariamente la frase

En el saco de mi corazón

En el saco de mi corazón caben todas las cosas, desde la ignominia a la ternura, desde las uvas de mujeres amadas hasta las corcholatas que me tiran los niños.

Cada hora deposita en mi corazón un objeto distinto,y cada vez que extraigo de él un recuerdo sale con sangre.
Yo me multiplico incansablemente. Estreno manos y bocas todos los días, cambio de piel, de ojos y de lengua,y me pingo un alma cada vez que es preciso.
Desde el amanecer hasta la noche la luz es distinta y se le llama día. Así me llaman Jaime. Pero yo duro tambiénen la oscuridad, más allá del momento impenetrable en que hago recuento de mis estrellas.

gracias Jaime Sabines

No quiero convencer a nadie de nada


No quiero convencer a nadie de nada. Tratar de convencer a otra persona es indecoroso, es atentar contra su libertad de pensar o creer o de hacer lo que le dé la gana. Yo quiero sólo enseñar, dar a conocer, mostrar, no demostrar. Que cada uno llegue a la verdad por sus propios pasos, y que nadie le llame equivocado o limitado.
(¡Quiénes quién para decir "esto es así", si la historia de la humanidad no es más que una historia de contradicciones y de tanteos y de búsquedas?)
Si a alguien he de convencer algún día, ese alguien ha de ser yo mismo.
Convencerme de que no vale la pena llorar, ni afligirse, ni pensar en la muerte. "La vejez, la enfermedady la muerte", no son más que la muerte, y la muerte es inevitable.
Tan inevitable como el nacimiento.
Lo bueno es vivir del mejor modo posible. Peleando, lastimando,acariciando, soñando.
(¡Pero siempre se vive del mejor modo posible!)
Mientras yo no pueda respirar bajo el agua, o volar (pero de verdad volar, yo solo, con mis brazos), tendrá que gustarme caminar sobre la tierra, y ser hombre, no pez ni ave.
No tengo ningún deseo que me digan que la luna es diferente a mis sueños.
gracias al maestro Sabines